sábado, 24 de noviembre de 2007

El diagnóstico.

Hoy es sábado, el martes me comunicaron el resultado del Pet: un tumor en el colon otro en el isquion y metástasis en el hígado. El tumor del colon está a 12 cm del ano por lo cual no van a quitármelo ya, esperaremos a ver la respuesta al tratamiento, el jueves 29 empezaré con la quimioterapia.
Lo peor ha sido la incertidumbre, los días y horas de espera sabiendo que ya tienen el resultado pero no te lo van a comunicar hasta vete tu a saber cuando.
Recuerdo con dolor los últimos minutos sentado en la habitación 555 con la puerta abierta y viendo pasar al médico una y otra vez, creo que nos dejó para lo último no se si por las malas noticias o por que sabia que lo preguntaría todo, en eso no he cambiado.
Quiero cerrar esa parte comentando que, en mi opinión, los servicios de oncología deberían disponer de un servicio de apoyo, psicólogos especializados, dedicados a los pacientes en período de diagnóstico, esas esperas pueden marcar como vas a enfrentarte al cáncer y a este hijo puta hay que plantarle cara con el ánimo alto, no hundido y con 6 kilos menos, que es lo que he perdido desde que empece a visitar médicos en septiembre.
Ayer, viernes, estuve con la gente de la Asociación Española Contra el Cáncer, en particular con una de sus psicólogas de apoyo, buena gente, por el resultado de la entrevista creo que suelen lidiar con personas en peor estado anímico que el mío, por que yo, quitando algunos ratos al final del día, me estoy encontrando cada día más animado.
Podría decir "con más ganas de luchar" pero no es exactamente eso, cada día que pasa, cada minuto, aprendo a disfrutar más de lo que estoy haciendo en ese momento, la cosa tiene gracia por que durante casi tres años he trabajado con María, mi terapeuta, tratando de aprender a ser feliz con las cosas pequeñas, las del día a día, tratando de no controlarlo todo, lo hemos trabajado con muchos progresos, pero ahora, ahora estoy disfrutando de estar aquí dejando sangre en el papel, como diría el bardo, como no me había sucedido antes.
Un ejemplo más prosaico de esta nueva, para mi, manera de ver la vida ha sido la lectura de "El ojo de jade" de Diane Wei Liang, una novela que podríamos clasificar como negra pero con una trama minimalista, cuatro personajes y un montón de páginas maravillosas, cualquier traslado de uno de los personajes es suficiente excusa para una descripción de las que lees y relees olvidándote por completo de la trama.
Todo lo contrario me ocurrió durante los días de espera con un libro de Jane R. Goodall, "El Visitante" otra novela negra, ésta repleta de personajes a los cuales se refiere indistintamente por su nombre o por su apellido, metidos en una vorágine de acontecimientos que te llevan a interesarte únicamente por el desenlace, perdiéndote por el camino toda la ambientación en un entorno tan favorable como Oxford y alrededores.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Es jodido hacer un comentario en un blog sobre cáncer, sobre todo cuando lo crea un amigo. Desde fuera, la primera intención es dar ánimos: no te preocupes, la ciencia avanza, los médicos son muy buenos, hay que ser positivos…Encima, intentando aparentar seguridad, pasando como de puntillas por no hurgar la herida, como si cuanto menos mencionamos el tema, menos grave va a ser.
Víctor, a la enfermedad la vas a vencer, no eres cabezón tú ni nada. Lo vas a pasar jodido, igual que tu familia. Pero cuando todo esto pase y no sea más que un mal recuerdo verás todo lo que has aprendido en este tiempo sobre la vida. Hay que ser jilipollas para que nos tenga que pasar una cosa como esta para que nos abra los ojos y la mente. Y nos creemos los reyes de la creación…
Bueno, no te canso más. Por aquí andamos. Sólo podemos intentar transmitirte fuerza y decirte que ya sabes dónde nos tienes.
Seguimos en contacto.
Un abrazo

miguel dijo...

Hola Victor.
Tus entradas en el blog ya lo dicen todo. Es algo que es tuyo (por cojones) y que hay que desterrar lo antes posible.

Tu actitud es admirable.
Tengo un nudo en la garganta que me llega hasta los dedos de las manos y me impide escribir.

Jamás pierdas el ánimo.
Un beso.

Miguel

Anónimo dijo...

Que puedo decirte, Victor, que no te hayas dicho tu ya, en estos últimos tiempos.

A mi me asaltan los recuerdos:un viaje, una ciudad preciosa, la gastronomía en tu casa o en la mía, las comilonas, el vino, los libros y las eternas discusiones sobre todo.

Estos recuerdos me llevan también a tu testarudez e inconformismo. Por eso se que no te vas a rendir. Y saber eso, me alivia.

Ánimo y fuerza. Como dice Santi, aquie estamos, aqui nos tienes.

Un beso que te haga un rojo
Geli

Unknown dijo...

Hola Vto
Gracias por esta iniciativa que nos permite acercarnos un poco. Todos andamos perdidos (aparte de cada uno con sus cosas) con esto tan tangible que te toca pasar.
Creo que mañana empiezas con la quimio. Es duro pero hay gente que no lo pasa tan mal. A ver si en eso tenemos suerte.
Cuenta conmigo, de verdad, para lo que te apetezca o necesites.
Un fuerte abrazo.

Cris